domingo, mayo 25, 2008

Te extraño, te olvido, te amo

Vuelvo, no se si lo necesito, creo, al menos, que no tanto como otras veces. Estoy apático, no se porque ni hasta cuando durará, no se si existe el motivo. Creo, simplemente que no veo alicientes que me motiven. Tengo miedo a perder y no quiero arriesgar. El problema de esto es que no tengo nada que perder.



Últimamente estoy escuchando mucho una canción que desconocía y que debe ser del año 97. El cantante es Ricky Martin, y me siento muy, pero muy identificado.

Dice una de las frases más bonitas que he oido sobre el amor. Concretamente sobre el amor no correspondido. "Por ti, por ti, por ti, he dejado todo sin mirar atrás, aposte la vida y me dejé ganar..."

Y el estribillo me puede. Parece que lo haya escrito yo.

La canción insiste, como anuncia el título, en que te extraño, en que te echo de menos, en que tengo un vacío que no se cómo ni con quién llenar, (si es que se puede...), en que sólo pienso en tí, en que canciones como esta todavía me recuerdan sólo a tí...

La canción abunda en que te olvido, en que llevo cientos de días intentando olvidarme de tí, borrarte de mi memoria, de mi corazón, olvidarme de que estuviste, de todo, absolutamente de todo, he intentado borrar tu bonito recuerdo, o tu insoportable recuerdo, he intentado sacar este clavo con otro clavo, como dicen los chinos, pero nada, lo he intentado todo, con ayuda, sin ayuda, sólo, de todas las maneras que he podido, borrandote de todos los sitios....pero no te olvido...

Y por último, te amo, como nunca lo he hecho con nadie, como nunca lo he sentido por nadie, hasta el límite de la pasión, lo hubiera dado todo, y aun hoy creo que lo daría todo. A veces me siento muy inutil, parezco gilipollas, pero si tuviese que tropezar 10 veces con la misma piedra creo que lo haría, de momento voy a tropezar por tercera vez, que no es poco.... A veces no me entiendo ni a mi mismo, he perdido mi identidad, hago cosas que antes criticaba, no soy yo. Debe ser que te amo...Es que te amo.

Javi Velilla

sábado, mayo 10, 2008

Si no te hubieras ido...



Si no te hubieras ido sería más feliz. Es una frase que podemos escuchar actualmente en las radios gracias a la nueva versión de Maná. Y así me siento yo de alguna manera.
¿Por qué? Porque te echo de menos, porque me abandonaste de repente, aprovechando mi estado, sin despedirte... Dejaste de llamar, no me coges las llamadas, no se nada de tí, ni puedo contactar contigo.
Es triste pero es así. Juntos hemos vivido momentos muy especiales en este último tiempo. Algunos muy buenos y otro no tanto. Has estado conmigo siempre, en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad. Has sido una grata compañía, has sido mi complice. Has ido allí donde yo he ido, siempre a mi lado.
Y no se te ocurre acabar nuestra relacion de otra manera que marchándote sin despedirte, sin dar una razón, sin decir un adiós, sin ningún motivo aparente.
Te vas y me abandonas, seguramente por otra persona. Aunque no me voy a quedar de brazos cruzados. No voy a permitir que le hagas feliz. No voy a permitir que tu, que eras únicamente posesión mía, te vayas con la primera persona que se te cruce.
Os voy a hacer la vida imposible. Ya he comenzado de hecho...
Me temo que nuestra relación se ha acabado para siempre, pero me repondré, y yo también te reemplazaré. También buscaré a quien haga tus funciones. No tengo problema. Pronto tu sitio estará ocupado.
Y como yo si soy un caballero, me despido de tí. Y te deseo la más pronta muerte, para que no te de tiempo a abandonar a nadie como me has abandonado a mi.
Adiós, Nokia N70.

Javi Velilla

domingo, mayo 04, 2008

Alguien



Debe ser que todavía necesito a alguien. Alguien que me mime, que me bese, que me apoye, que me ayude, que me respete, que me entienda, que me susurre, que me encienda, que me aconseje, que me roce, que me mire, que me siga, que me acompañe, que me indique, que me ame, que me mande, que me adore, que me proponga, que me coma, que me busque, que me alegre, que me llore, que me caliente, que me enfrie, que me extrañe, que me baile, que me espere, que me duerma, que me despierte, que me explote, que me quiera.
Solo alguien que me haga feliz...Quizá pida demasiado...

Javier Velilla