Cuando aun colean los ecos del gol rastrero y tramposo del Atletico de Madrid en Villareal, el fútbol ha dictado su veredicto. Y es que en un torneo disputado recientemente, se jugaba la final entre F.C. Barcelona y R.C.D. Espanyol de categoría alevín. En el transcurso del partido, un jugador del Barça queda tendido en el suelo y el jugador del Espanyol que tenía el balón lo lanza fuera. Una vez recuperado el jugador blaugrana, su compañero saca de banda, pero el delantero en lugar de devolver el balón, continúa la jugada ante el asombro del público y de los jugadores rivales.
Poco después, el entrenador del Barça, aconseja a sus jugadores dejarse encajar un gol, para que el partido se iguale de nuevo. De esta forma, los jugadores se quedan parados y el jugador del Espanyol introduce el balón dentro de la portería, dejando las cosas como estaban.
Desde este humilde blog, felicitar al entrenador blaugrana por su gesto deportivo y por dempostrar que, em estas categorías lo principal es formas personas, ya que tiene una misión de educador.
Creo que estas acciones son las que engrandecen al deporte en general y deberían ser un ejemplo para todos, también para los profesionales.
Tomen nota.
Javier Velilla
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