martes, junio 03, 2008

Felicidades Gordi!!





Cómo todo lo bonito, has llegado sin querer. Como si fuese un accidente, apareciste en mi vida. De casualidad. Ni yo te conocía ni tu creo que me conocieses a mi. Aceleramos la moto de 0 a 100, y de no conocernos a penas, pasamos a hablar largas horas contándonos todo de nuestra vida.
En esas conversaciones pude ir vislumbrando a una buena persona, de carácter abierto, enamorada, con aparente sonrisa permanente… Alguien a quien cada día que pasaba me apetecía más conocer.
Nuestra situación en ese momento nos permitía vernos alguna vez por semana, y aunque debo reconocer que los primeros días estaba un poquito nervioso, (no se muy bien por qué), igualmente tenía ganas de verte. Todo comenzó con un tímido saludo desde la distancia, acompañado de esas sonrisas de no sé qué decir. El paso de los días acumulaba horas de conversación vía Messenger, y de vez en cuando encuentros, casi siempre cortos, en los que poco a poco iban apareciendo las palabras.
La velocidad era cada día más elevada hasta el punto de conectarme sólo para hablar contigo. Estas conversaciones han dado pie a confesiones íntimas, privadas, que quizá nadie, o únicamente la/s persona/s más importantes de mi entorno (2 como mucho) saben. Esto tiene un significado y un valor que aprecio mucho, en exceso. Te has ganado mi confianza. Y con ella mi respeto. Porque el cariño ha brotado, y tu sensibilidad y tu sencillez han ido cautivando mi amistad. Y en parte, has llenado, o estás llenando un vacío afectivo que por C o por B nadie llenaba en estos momentos.
Supongo, y lo entendería perfectamente, que yo no haya alcanzado ese grado en tí, posiblemente porque no existiese ese vacío, pero quien sabe si algún día lo llenaré.
Anteriormente, cuando me pasaba algo así, solía, antes o después, prendarme de la chica, o tener intenciones que traspasaban el mural de la amistad, pero es que esas relaciones ni mucho menos eran ni tan intensas ni tan especiales como esta. Y es que, como dijo Rafael de León en su obra "La Profecía", "porque sin ser tu marido, ni tu novio ni tu amante, soy el que más te ha querido, con eso...con eso tengo bastante"
Ahora, simplemente disfruto de esa confianza que me das, de esa atención que me prestas, de ese oído que quiere escuchar, y de esa amistad que quiere nacer.
Sé que eres feliz, tienes motivos. Quiero que sigas siéndolo, rodeada de quienes hasta ahora te han rodeado y te han querido, pero te quiero pedir que a partir de ahora, me guardes un rinconcito pequeñito para ser feliz contigo. Para disfrutar contigo, para sufrir contigo, para reír y vivir contigo.
Por todo lo que me has dado, y me has hecho sentir desde que nos conocimos, por todo lo que espero que te haya dado yo, y por todo lo que espero que nos quede por darnos, por todo eso, te pido que ¡NO CAMBIES NUNCA!

¡¡Feliz Cumpleaños!!

Javi Velilla

No hay comentarios: