Las mañanas de los sábados siempre son duras. Siempre cuesta madrugar en esos días que parecen hechos para el descanso. Pero todo tiene su recompensa.
Mi imagen para las mañanas de los sábados es la de un padre y un hijo. Un hijo y un padre que han madrugado para disfrutar. Un padre que camina junto a su hijo perfectamente uniformado con el traje de su equipo, cogiéndole del hombro, y conversando de lo que será o ha sido el partido. Cada vez más, estaimagen sucede con la madre, o con ambos, lo cual no hace sino mejorarla si cabe.
¿Hay algo más bonito que un hijo con sus padres orgullosos y felices de ayudar a su hijo a ser un poco más feliz, más sano, más sociable...? Lo dudo.
Pocas cosas son tan bonitas como la sonrisa de un niño tras anotar un gol, una canasta, o la imagen de 10 ó 12 amigos abrazados y sonrientes porque han ganado el partido.
Personalmente, estas situaciones me tocan la fibra sensible, y me hacen ansiar el momento en el que yo haga de padre y repita lo que mi padre hizo conmigo, y lo que miles de padres hacen cada sábado por la mañana. Porque para ellos, madrugar una mañana de sábado, es un poco menos duro.
Javier Velilla
4 comentarios:
Desde luego que esas estampas que describes son preciosas, pero, educamos a los niños para que también sepan encajar las derrotas? Para que aguanten la presión?
Besitos de lunes!!
Eso espero, por ello trabajo lunes, jueves y sabado de cada semana, y creo que lo estoy consiguiendo. Estoy mu orgulloso de ellos. Lo están haciendo muy bien.
Muchas gracias, comentadora fiel.
Son recuerdos que nunca nadie nos podrá quitar, q t hacen esbozar una sonrisa cada vez que te acuerdas.Los padres sacrifican su vida entera por nosotros,y nunca todo lo que sacrifiquemos nosotros por ellos será suficiente. Afortunados somos de haber podido disfrutar de esos sabados por la mñn. Los mios con mi padre eran inolvidables, pero espero que aunque de otra manera, pueda seguir disfrutando de más momentos como aquellos. Besinosss
ahmm soy mujer... lo que implica que mi señor padre nunca me llevó a ningún partido, bueno a decir verdad si lo hizo... pero no fue muy divertido. El único recuerdo que viene a mi mente con la palabra "partido" son mis compañeros con cerveza en mano y gritando cosas muy tontas.
Me pregunto qué hacen las niñas los sábados por la mañana... no recuerdo haber hecho nada en especial.
Un abrazo =)
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