viernes, septiembre 28, 2007

Copenhague --> La llegada

07:15h. 27/09/2007

Estoy inmerso en un AVE. Mi vida transcurre a cientos de kilómetros por hora. Me alejo.
Es algo más que un viaje, es una búsqueda. Una búsqueda de ideas, de sentido. Una búsqueda de estabilidad, la misma que me falta al escribir estas líneas.
Voy lejos, lo suficiente como para analizar las cosas desde la distancia. Las respuestas que encuentre quizá sean definitivas. Puede ser un punto y aparte, un antes y un después. Puedo volver con una vida nueva, no me importaría.


14:55h. 27/09/2007



Sólo unas pocas horas más tarde y mi vida va todavía más deprisa. Estoy volando sobre una Europa totalmente nublada, que parece querer desaparecer bajo este manto de algodón que la cubre. El Ipod se digna a ofrecerme en estos momentos "El canon de Pachelbel", una sintonía inmejorable para estas vistas.



La mañana ha ido a la perfección, desde el AVE, un abrir y cerrar de ojos y ya estaba en la capital. El metro, con un niño cambiándole la vida a su padre, una azafata con cara de amargada, un tipo cargado de piercings y tatoos y una chica morenita preciosa. En el avión, he cambiado a la morena por decenas de rubias con ojos claros, presagio de lo que me espera.
Una de cal y una de arena, eso me regala el Ipod. No tiene otra que "Si tu no estas aqui" de Rosana, y con ella pensamientos que no me dejé en España como prometí. Espero que por lo menos no molesten demasiado estos días.



11:12h. 28/09/07



La llegada fue genial. La maleta a la primera y encontré todo a la primera, vamos, que parecía que levaba años viviendo en Copenhague.
Nada más llegar, y aun sin tener la maleta, hice mi primera contribución económica al país. Un perrito caliente. Los de Iberia son unos rancios y te cobraban 8 ó 9 euros por un bocadillo, así que nada más llegar me pillé un perrito por...6 eurazos, o lo que es lo mismo, 44 coronas danesas. Primera movida, aquí no hay euros, aunque en el puesto ese pude pagar con nuestra querida moneda.
Al salir, en seguida me encontré a Afonso y a David, un chico gallego amigo de Alfon que vino a buscarme también. Al salir del aeropuerto fuimos a coger un tren que nos llevaba al centro. Casi se nos escapa, y con las prisas, entramos sin pagar (sin querer, os lo juro). Una vez dentro, "los daneses"(Alfonso y David), dijeron que no pasaba nada, que nunca pasaba el revisor. Diez segundos vimos a la revisora pidiendo billetes. Huímos hacia el lado contrario y bajamos en la primera parada, que, lógicamente no era la nuestra. Picamos los viajes pero, esta vez queriendo, picamos uno de menos (según en que zonas hay que pagar dos viajes) y subimos al siguiente tren. A los 20 segundos, ¿quién...? Exacato!! La revisora. Y nosotrossin billetes suficientes...¡Olé!
Nos hicimos un poco los tontos y la tía se compadeció y se conformó con que bajasemos a picar la vez que nos faltaba. A partir de ahí, todo bien. Llegamos al centro y fuimos a piyar un bus que nos acercase a la Resi de Alfon. Aquí todo el mundo va en bici. Decenas de bicis, cientos de bicis, miles de bicis, no exagero. Después de llegar a la Resi esperamos a unos amigos de Alfon y David y fuimos a por comida y carbón, y por supuesto bebida, para hacer una barbacoa. Y persiguiendo
al carbón hice mi primera vuelteta en bici. Fue en la bici de Marina, una catalana amiga de "los daneses". También vinieron Emilio y Encarni, granaino y sevillana respectivamente, que son los compañeros españoles de Alfon en la Resi. Cuando por fin tuvimos carbón, nos dispuesimos a empezar la barbacoa. Al principio nos costó que tirase el fuego, pero después nos salió una brabacoa DE PUTA MADRE. La única pega el frío, pero estamos en Copenhague, ¿qué quereís?



Tras la barbacoa nos fuimos Emilio, Encarni, Alfon y yo a buscar a otra española Anabel, de Málaga. Una chica muy marchosa y maja que nos llevó a un garito llamado Mambo, donde ponen música latina. Anabel me enseñó a bailar bachata y Encarni, salsa. Ahora soy todo un maestro. También aprendí Reaggeton, lease Refrotón. Y de ahí, tras habernos pimplado unas pocas pintas a 40 coronas...6 eurazos, que ya vale!! Nos fuimos pa casita. Un peta, petiti y a la piltra. Pa ser el primer día no ha estado nada mal, esto promete.



Pd:Menuda concentración de rubias y de ojos azules que hay por aquí, impresionante, ya me estoy hasta acostumbrando...¡Qué triste!



Javier Velilla, desde Copenhague.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Cómo me alegro de que te lo estés pasando tan bien!!! Sigue así!! Los malos pensamientos se quedaron en el cielo, justo encima de las nubes. Barbacoa?! Qué apetecible! Yo quiero! Por cierto, me ha encantado esta frase: "Un niño cambiándole la vida a su padre".
Besitos!! :)

Veli_6 dijo...

Ya ves! Bueno, de paso este viaje te puede servir para conocer a Alfon, que ya he visto que te ha comentado y sé que le gusta mucho tu blog!Es el de la sudadera con gorrito! LA VERDAD ES QUE ESTOY DE PUTA MADRE, me alegro de que te alegres jeje!!
Un besazo

Unknown dijo...

Hola Alfon!! ;)
Muy chula la sudadera!!!
Y seguid así, de puta madre!! Besos!