Hay cosas que se ven venir. Sabes que tarde o temprano van a ocurrir. Se puede cerrar los ojos, mirar hacia otro lado, pensar que no te va a pasar a tí, pero se ve venir.
El pasado sábado día 30 de Julio, sobre las 11 de la mañana, un conductor de 21 años atropellaba mortalmente a un peatón de 74 y se daba a la fuga. Conducía bajo los efectos del alcohol y otras sustancias.
De esta desagradable noticia me enteré por la prensa, y lo lamenté mucho, pero nunca pensé lo de lo que me enteraría días después.
El caso es que el conductor era un antiguo compañero de colegio, y durante muchos años también de equipo de fútbol.
Desde pequeño, se comportamiento era rebelde, en ocasiones excesivo, y las malas compañías introdujeron a ese por entonces preadolescente, huérfano de padre, en un mundo no demasiado aconsejable. Durante un tiempo fuimos compañeros de batallas, y mantuvimos una relación relativamente cercana. Por suerte o por desgracia, tomamos rumbos distintos, y hoy, mientras yo escribo estas terribles líneas, el ya se encuentra en su celda, en su cárcel.
Espero y deseo que su estancia allí sea lo menos tormentosa posible, y que todo el tiempo del que va a disponer le sirva para pensar, recapacitar, y tomar decisiones que reconduzcan de una vez por todas su vida...
Javier Velilla
2 comentarios:
Hola!! que tragico, no? la vida da muchas vueltas, el mundo de la carcel es muy chungo, conozco un chico que esta ahí y sin tener la culpa, como tu dices las malas compañias.
Besos!!
Pues si, es trágico, pero cada uno se busca su futuro. NO se si es culpa suya o de las circunstancias, pero se veía venir y nadie puso remedio.
En fin, muchas gracias por visitar mi blog, prometo seguirte en el tuyo. Un besazo
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